23 septiembre, 2010

> Protestemos de un modo diferente

Me parece importante compartir las vivencias que hemos tenido en estos últimos días en el curso de Relaciones del Trabajo, de la Facultad de Ciencias Sociales, de la que soy docente. Creo que finalmente debemos compartir el intento conjunto de dar cuenta de lo que enseñamos y aprendemos. A nadie escapa la situación de nuestra Facultad. Los días de paro son absolutamente legítimos y entendibles, y yo los he apoyado y los apoyo, pues es triste advertir el estado de nuestras aulas, de nuestros ascensores… de tantas otras cosas. Sin embargo, esta situación ha comenzado a perjudicar a nuestras propios alumnos aún más de lo que ya se ven perjudicados por las causas del reclamo. Ellos reclamaron por su también legítimo derecho a recibir sus clases. Hay alumnos que se reciben con nuestra materia.
Nos organizamos: la predisposición de todos, docentes y alumnos, luego de explorar múltiples opciones, concluyó con una propuesta aceptable para todos. Este jueves, la clase se dará en un bar cercano a la Facultad, intentando de este modo satisfacer los intereses de todos. De eso se trata el comportamiento colaborativo que pregonamos como otra alternativa posible y que consiste en contemplar los intereses de los otros y los propios. Creemos en soluciones de este estilo, que no impliquen ir en contra de nadie sino a favor de todos. De esta manera, nos mantenemos unidos a los reclamos, pero mantenemos el deber y el derecho de dar las clases a quienes así también lo requieren.
Los directivos de la Facultad instaron a recuperar el diálogo y nuestra cátedra se pone a disposición de dicha idea. Adhiero a la protesta, adhiero a que no se perjudiquen intereses dignos de ser contemplados… pero tal vez sea hora de pensar en empezar a protestar de un modo diferente, protestar construyendo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario