Cuando hablamos de exclusión, inequidad, lo primero que pensamos es en la economía y los factores que la rodean directamente. Hoy después de este tiempo mediando, un año ya, entendemos que la inequidad y la exclusión son simbólicas también y tienen que ver con la palabra, con la posibilidad de restituir derechos, involucrarse, participar en lo que nos pasa. Poder decir, ser escuchados, es una forma de ser, de tener identidad, dignidad…
El estado históricamente se vinculó con los ciudadanos de manera vertical. Esto lo podemos pensar en materia de salud, seguridad, educación. Hoy la justicia, a partir de la mediación, propone, invita a una relación horizontal devolviendo derechos, palabra para decidir, comprometerse de manera pacífica, trascendiendo algún posible acuerdo y pariendo una nueva forma cultural de resolver lo que nos pasa como ciudadanos, como comunidad, no a partir de la queja, sino a través del diálogo, escucha, propuestas y compromiso.
Orgullosos y agradecidos de ser parte de este momento, renovamos el compromiso que esta tarea requiere aprendiendo juntos para hacerlo mejor cada día.
Reflexiones de mi amigo del alma, Sergio Arch Guerrero, Mediador del Centro de Mediacion Comunitaria de General Guemes, Salta, a un año de la puesta en marcha de la Mediación Comunitaria.
La vida me regaló conocerlo compartiendo como docente el espacio de su capacitación… el discípulo supera al maestro… sin duda.
28 octubre, 2010
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario